En el verano y debido al calor es conveniente aumentar la ingesta de agua, bebe aunque no tengas sed.
Es esencial beber al menos 2,5 litros de agua, ya que por la sudoración perdemos mucho líquido que hay que recuperar.Vigila a los más pequeños y dales los líquidos suficientes para prevenir cualquier caso de deshidratación, que puede conllevar problemas graves. Una buena opción a la hora de mantenerles hidratados no consiste en ofrecerles exclusivamente agua; las frutas y las leches se convierten también en excelentes aliados para conseguirlo.
Las mujeres embarazadas deben incrementar en 300 ml al día su ingesta de agua.
Las mujeres en época de lactancia, deben aumentar su ingesta de agua en 700 ml al día.
Las personas mayores deben beber entre 2 y 2,5 litros de agua debido a que con la edad disminuye la sensación de sed y su capacidad renal. Es importante que beban, aunque no tengan sed, para que no se deshidraten.
Si tienen problemas a la hora de beber agua, existen aguas gelificadas para facilitarles el reponer líquidos.
Si realizas ejercicio físico hidratate antes, durante y después ya que con el ejercicio pierdes agua y sales minerales. Es importante que evites las horas centrales del día.Si tienen problemas a la hora de beber agua, existen aguas gelificadas para facilitarles el reponer líquidos.
Algunos de los síntomas provocados por leves estados de deshidratación son:
- Sed.
- Boca seca.
- Dolor de cabeza.
- Fatiga.
- Cambios de humor.
- Calambres
- Dolores musculares.
En cuanto al golpe de calor, los síntomas son:
- Piel seca y caliente, y ausencia de transpiración.
- Confusión mental o pérdida del conocimiento.
- Ataques o síncopes.
Los beneficios de beber la cantidad suficiente de agua son que:
- Tendrás la piel más sana, limpia y sin arrugas.
- Eliminarás toxinas. Beber agua a menudo es esencial para mantener nuestro organismo libre de sustancias potencialmente tóxicas.
- Es un gran diurético ya que para evitar retener agua, hay que tomar más agua.
- Mejora tu rendimiento físico. Es recomendable tomar agua antes y después de alguna actividad o ejercicio físico para evitar calambres.
- Te ayudará a evitar el estreñimiento.
- Te ayudará a regular la temperatura corporal, disminuyendo la sensación de calor.